Ya está aquí, probablemente en estos días empecemos a notar la temida caída del cabello vinculada al cambio de estación… Lo primero, ante esta habitual caída del pelo en las mujeres, es no ponerse nerviosa ni agobiarse, ya que se trata de una caída del cabello temporal (suele durar de septiembre a noviembre) y de un proceso totalmente normal. ¡Nada de estar contando los pelos que se te caen!
Para empezar, vamos a desterrar unos cuantos mitos sobre el pelo y es que, según los expertos de la AEDV (Academia Española de Dermatología y Venereología), el número de veces que lavamos nuestro cabello no influye en su posible caída, por lo tanto, podemos lavarnos el pelo todos los días, si nuestro tipo de cabello así lo requiere. Otra creencia equivocada es la de pensar que cortarnos el cabello con mucha frecuencia, o incluso raparnos la cabeza, ayuda a fortalecer el pelo.
Para afrontar la caída del cabello en otoño, que tiene el mismo patrón de comportamiento que la caída de pelo que tiene lugar en primavera, lo único que podemos hacer es cuidar más que nunca nuestro cabello.
Cómo afrontar la caída del cabello estacional
- Cuidar especialmente el pelo en verano para protegerlo de las inclemencias a las que lo sometemos: sol, piscina, playa… Si lo consideras, necesario, somételo a un tratamiento reparador.
- Vigilar nuestra alimentación, evitar los excesos y seguir una dieta equilibrada y variada. ¡Somos lo que comemos!
- Dar esquinazo al estrés e intentar estar tranquila.
Para finalizar, ten mucho cuidado con los supuestos “productos milagros” y, ante cualquier duda, consulta a expertos y especialistas en el cuidado del pelo. Si consideras que tu caída de cabello no corresponde a una caída de pelo estacional, acude a un dermatólogo.
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