Las trenzas son uno de los recursos más sencillos y que mejor resultado dan a la hora de crear un recogido romántico y de aire naíf. Solo necesitas un montón de horquillas y una diadema de pelo sintético previamente trenzada para conseguirlo.
¡Empezamos!
Primero cepilla bien tu melena para asegurarte de que no tiene ningún nudo. Este paso es muy importante porque te facilitará el resto del trabajo y te hará conseguir un efecto mucho más pulido, así que tómate unos minutos y hazlo a conciencia. Si tu pelo se enreda con facilidad o es muy fino te recomendamos que utilices un espray que haga este paso más sencillo y menos incómodo.
Segundo paso
A continuación separa tu cabello en dos secciones trazando una línea en el medio de la cabeza. Empieza por la frente y sigue hasta la nuca. Ahora, coge la parte del flequillo del lado derecho y llévala hacia el izquierdo de modo que tengas una raya lateral en la parte frontal y una raya en medio en el resto de la cabeza. Toma una de las secciones y asegúrala con una pinza o un pasador para que no te moleste. Puedes hacerte un moñito si tienes el pelo muy largo. Rocía la otra sección de cabello con un espray texturizador o un champú en seco y reparte bien el producto con los dedos. Vuelve a pasar el cepillo varias veces para terminar de desenredar y recuperar el brillo natural de tu melena.
La trenza
Ahora comienza a hacerte una trenza de tres cabos empezando justo detrás de la oreja. Cuando hayas acabado asegúrala con una goma de plástico transparente. Otra opción es hacer una trenza de cuatro cabos o una de cola de pez para un toque más original. Elijas la que elijas procura trenzar el máximo de cabello que puedas porque después será más fácil esconder el sobrante. Suelta la otra sección de pelo y repite la misma operación.
Y por fin…
Una vez tengas hechas las dos trenzas, cárgate de horquillas, planas y de las de moño. Toma la trenza del lado derecho y abre un hueco en la sección contraria de cabello que está sin trenzar, es decir, justo por encima de la oreja izquierda, y esconde en él el final de la trenza. Asegúrala con horquillas, pon tantas como necesites para que no se caiga. Coge la otra trenza y haz lo mismo en el lado contrario.
Unos consejitos
Si tu cabello es muy largo o llevas extensiones tienes dos alternativas. La primera es la de hacer una sola trenza y enrollarla sobre si misma hasta que obtengas un moñito con forma de flor. La segunda es que mantengas la idea de las dos trenzas pero en lugar de esconder el cabo bajo la sección contraria de cabello, hacerlo en la misma plegando las trenzas sobre sí mismas.
Ahora solo queda deshacer ligeramente el peinado pellizcando el cabello con los dedos para conseguir un aire más desenfadado y colocar tu trenza diadema sobre la cabeza. Si quieres puedes asegurarla con un par de horquillas bien escondidas para que no se mueva. Un poco de laca ¡y lista!
Imagen utilizada conforme a la licencia de Shutterstock.com.
