Shibori: una nueva técnica para dar color a tu pelo

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¿Habías oído alguna vez la palabra ‘shibori’? No, no es un tipo de comida japonesa ni nada parecido, es una técnica de teñido para el cabello que te va a dejar con la boca abierta. Se inspira en la forma de teñir las telas tan características de los años 70, ya sabes formas geométricas irregulares que se conseguían anudando los tejidos y que combinan varios colores diferentes.

Cómo teñir una melena al estilo shibori

Se trata de una técnica creada en Estados Unidos, más concretamente en Hollywood, por la famosa colorista Tanya Ramírez. Para empezar, habría que partir de un color base muy claro, tal vez un platino muy clarito o un azul pastel. En la mayoría de las melenas sería necesaria una decoloración para conseguir un tono tan suave.

Después se van cogiendo mechones de pelo y se impregnan con el resto de tonos elegidos. Lo más habitual es optar por una gama de azules, aunque las chicas más lanzadas que se atreven con los rosas y violetas e incluso con tonos amarillos y verde lima. Este proceso se realiza con la ayuda de un palito de helado y un papel especial en el que se va enrollando el pelo. Dependiendo de la forma en que lo coloque el estilista, obtendrás un dibujo diferente.

 

Para lucir una melena shibori de verdad es imprescindible llevar el cabello suelto. Será entonces cuando se aprecien las figuras creadas con el tinte. No obstante, si te recoges el pelo aparecerán otras nuevas que le darán mucho mayor dinamismo.

Elegir bien los colores

Para inspirarte a la hora de elegir los colores de tu shibori puedes tomar varias referencias que te ayuden a conseguir un resultado incluso más original. Piensa en tus juguetes de infancia, como los ponys o algunas muñecas, porque ellos ya fueron precursores de esta tendencia.

También te puedes inspirar en las prendas tie dye, ya sabes, las que utilizaban los hippys y que se pusieron tan de moda hace un par de veranos. Lo normal es que combinen diferentes tonos del mismo color (y siempre en sus variantes más suaves) aunque si eres muy atrevida puedes optar por combinar verdes, azules, rojos y amarillos creando espirales y otras figuras.

¿Os animáis a probarla?

Imagen: 123RF

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